Meñacoz. La Lancha
A Meñacos íbamos en lancha. Por el acantilado de Barrika era muy complicado y escarpado, se tardaba mas y había peligro de caerse. Lo primero que hacíamos mi mejor amigo Nacho, dueño de la lancha y yo, era ir a la gasolinera de Regoyos, con un bidón de plástico de 5 litros para llenarlo de gasoil industrial; el mas barato a 0,25pts. el litro (el gasolinero, miraba para otro lado, porque solo podía vender a vehículos de trabajo y lo nuestro, claramente era ocio) para el motor fueraborda Seagull de la lancha. Después íbamos a por el carro de remolque náutico, que estaba en su casa. Aquella casa, muy grande y de diseño vasco francés, se coronaba con una magnifica torre. Tenia 3 pisos y la torre. Por las desvencijadas escaleras hasta la torre, subíamos y bajamos correteando, Nacho , Alfonso, Iñigo, Michí, Rafa, Borja, Alf... o Jeringa, Michi, Mini, Escu, Cavero, Veneno, Zubi, Rafilla , --nuestros motes- además de los 9 hermanos que habitaban la casa. Alli y en su inmenso jardín, pasá